10 errores inconfundibles que puedes cometer en Social Media cuando empiezas

Seguro que te ha pasado, o te lo han dicho.  Tener presencia en redes sociales, tener un blog, unas cuantas redes sociales (a veces demasiadas), no es tener presencia Social Media. Con esto no basta. Para hacer que tus visitas desde Social Media aumenten respecto al tráfico web total (directo, orgánico y de referencia), hay que hacer algunas cosas antes. Los errores, muchas veces, se cometen desde ese minuto cero en Social Media. Hoy repasamos los 10 más comunes.

Errores que tu marca tiene que evitar en Social Media

No tener antes una web (decente)

¡Quiero tener redes sociales para vender! ¿Y tu web? Le preguntas. No la encuentro. Por eso, porque no la tienes. Si vas a atraer tráfico y hacer comunidad en Social Media, debes tener una web responsive y adecuada a tus objetivos, antes de nada. Un lugar dónde el usuario consultará tus productos y servicios. Que la verá bien, y tendrá una experiencia de navegación óptima, desde cualquier dispositivo.

Pedir mucho y poner poco (presupuesto)

El paso de los años te da experiencia, y ya ves venir al que pide mucho y da poco a cambio. Todo trabajo tiene una remuneración adecuada al tiempo invertido. Si pides 10, invierto 10; si pides 20; invierto. Pero debes poner en la mesa esos 10 o 20 en recursos. Cada marca cuenta con su presupuesto, pero no con todos los presupuestos se puede hacer lo mismo. Claro, ¿no? Por cierto, si necesitas un presupuesto, me pides uno 😉

Decidir tu la estrategia sin contar con el profesional (el que se deje, claro)

Venga. Pongamos que empiezas en Social Media con tu marca. ¡Venga, a publicar  a lo loco! ¡Qué me conozcan en el ancho mundo! ¡A todas horas! ¿Y la estrategia? ¿Cuándo es mejor publicar? ¿Qué público tenemos? ¿Como publicar en cada red social? ¿Y en el blog? Unos parámetros a tener en cuenta antes de dar un sólo paso.

Crear perfiles sociales y ‘a funcionar’

Existe el pensamiento erróneo de que toda marca debe estar en todas las redes sociales, o tener un blog, porque sí. ¿está tu público ahí? ¿esa red social, cómo se comporta en tu área geográfica? ¿Es una inversión o vamos a perder el tiempo? Elegir con cabeza en qué redes estar, y por qué.

Crear los perfiles y no utilizarlos (debidamente)

Tenemos presupuesto, y tenemos los perfiles y el blog. ¿Has pensado antes qué vas a comunicar a tu comunidad? La experiencia, semana a semana, te dirá qué contenidos funcionan mejor y cuáles no. Pero tener los canales y no utilizarlos, es peor que no crearlos. Dales uso, calendariza tu actividad, y mide los resultados.

No saber en qué redes estar (pero las creamos, por si acaso)

Como veo que mi competencia ‘Pepito’ a creado Pinterest, pues yo también, no voy a ser menos. Y voy a crear una cuenta en Instagram, porque todo el mundo habla de ella. ¡Para algo servirá! ¡Error! Invierte tu tiempo, que es tu dinero, en los canales dónde la actividad Social Media va a ser más productiva.

Hablar de uno mismo (siempre)

Te toca publicar. ¡Y venga a hablar de uno mismo! ¿Te has parado a pensar que no eres tan importante? ¿Sabes cuánto contenido interesante existe a tu alrededor? Habla de tí, sí, pero una parte. El resto, comparte contenidos de los demás que son afines a la marca. Practica una buena estrategia de curación de contenidos.

No compartir nada de los demás

A lo demás, como a uno mismo, le gusta que de vez en cuando ‘le den bola’, le compartan el contenido que con tanto esfuerzo y creatividad hacen. Sé generoso, con fundamento, y los demás te lo agradecerán. Y se crean vínculos más allá de las redes, por experiencia 🙂

No interactuar con el contenido de los demás

Cuando entras en Facebook, o en Twitter, o en Instagram, todo ese contenido que te encuentras, que puedes deslizar arriba y abajo, es de otras personas que, como tú, buscan la visibilidad. Participa del que te aporte algo, porque te interesa, porque es un amigo tuyo o amiga y todo te gusta, por lo que sea. Pero no te quedes en tus perfiles de marca o personales. ¡Hay vida más allá de uno mismo! 😉

No gestionar ‘nunca’ las notificaciones ni comentarios

¿Sabes esos avisos que recibes en tus redes sociales cada vez que miras el móvil? Pues eso son notificaciones de interacciones con tu contenido. Agradece, responde, siempre ágil y con una sonrisa 🙂 Si alguien se toma la molestia de leer tu contenido, y comentarlo y compartirlo después, que menos que dedicar el mismo tiempo a ser agradecido por ello. ¿Sabes que las publicaciones con más comentarios son más relevantes para los demás?

Así que ya sabes. Es mejor empezar con buen pie en Social Media. Elige a un profesional que te asesore y trabaje contigo en este camino online que empiezas. Evitarás peder el tiempo, y tu dinero 🙂

Gracias por llegar hasta aquí. Este contenido es Creative Commons. Compártelo, edítalo, deconstrúyelo, pero cita la autoría. Soy Fernando Cebolla, contador de historias Social Media y Marketing Online. Gracias 🙂